Las frutas de Halli Galli han cogido sus instrumentos y ¡se han ido de fiesta!
Por turnos, los jugadores van sacando cartas y, en cuanto haya dos cartas que coinciden en dos características, tienen que intentar ser los primeros en tocar el timbre. Y atención a la ciruela cantante, ¡siempre hay que tocar el timbre cuando sale!
Al final de la partida, quien tenga más cartas gana.
¡No te quedes sin esta alocada y divertida variante del clásico Halli Galli!