Es primavera y el deshielo llena los cauces del río, abriendo el camino de vuelta a casa para los salmones. Cada jugador controla un banco de salmones que intenta remontar el río para dejar sus huevos en el lugar en el que nacieron, tras una larga vida en alta mar. Por el camino deberán evitar ser devorados por hambrientos osos, feroces aves rapaces y pacientes garzas.
Cuando todos los salmones estén en la zona de desove en lo alto del río, o hayan perecido, la partida acaba y el jugador con más puntos será el ganador.